DANIEL MONTAÑO: EL ARTE DE INCOMODAR

Nacido en Antofagasta y criado en Iquique, Daniel Montaño -o Danielonko, como se le conoce- publicó este año y bajo autoedición, su primer libro formal de poemas: “Señales de Humo”, volumen que por primera vez intenta abrir a un público mayor el proceso de creación que Daniel venía llevando desde hace años en canciones y poemas garabateados en cuadernos.

Sin concesiones, Montaño materializa en este texto sus propios fantasmas de tiempos pasados, quizás, intentando expiarlos. “El libro trata de un montón de historias ocurridas en el norte -Arica, Iquique, Antofagasta- relacionadas todas al consumo de pasta, exceso de alcohol, mis inicios en lo delictual -sólo quedé en inicios- peleas, pacos, inventos para conseguir plata, robos, pero por sobre todo, es la filosofía de la mierda del hoyo más profundo”, ataca Danielonko.

Como “poesía de principios políticos” rotula Montaño su apuesta, la que -en términos militantes- responde al movimiento Pu-Runka, del cual él es el único miembro. “A esta agrupación, sólo yo pertenezco, y es bastante cómodo así”, reconoce. “La idea es hacer arte sólo si lo mueve un pensamiento político claro”, postula Daniel. E incluso, va un paso más allá en esta línea de pensamiento: “¿Saben cuándo se podrá disfrutar del arte por el arte?... Sólo cuando estemos todos bien, antes, no es digno”.

Es que bajo la mirada de Danielonko, en un mundo repleto de renuncios, “el arte debe molestar, debe ser incluso destructivo con el público, no en el sentido de hacerle daño físico, sino de removerlo como sea”.

En cuanto a los textos, según propia descripción responden a “una forma de pensar torcida”, la que cruza todo el libro. “Es mi regreso a algo que nunca hice bien. Ahora, humildemente, muestro mi primer trabajo con la única idea de que sirva de material de educación para quienes siguen los caminos que no están dibujados”.

Para los interesados en la publicación, que el mismo Montaño comercializa, pueden tomar contacto en el correo electrónico tobasimi@yahoo.es. Acá, algunos poemas recopilados en “Señales de Humo”.

CUMPLEAÑOS III

Me gustan los cumpleaños de niños
Siempre y cuando el que cumpla años quiera compartir
Las pequeñas cosas que tendrá ese día.
No me gustan los cumpleaños
Con padres desconocidos
Que hablan del calor que hace y los temblores.
No me gustan los cumpleaños en hogares de menores
Sin padres jornaleros
Y madres costureras
Que aman a sus hijos
Sabiendo que pronto termina la tragedia.
Me gusta el cumpleaños del tirano
Con sus hijos mostrándose como bloque,
Pero que en realidad han quebrado entre ellos
Hace mucho tiempo.
Me gusta el cumpleaños de Marie-May
Si la sorprendo como nunca pude hacerlo
Y es feliz por mil pesos.
No me gusta el cumpleaños de Dios
Ni el mío
Ni el de la Pachamamita
Con su piel colgando de barandas de cobre
Convertidas en productos industriales
Para ti.

CONFORME

Conforme estoy
Porque sé de qué se trata
El dibujo que tengo al frente.

Conforme estoy
Porque sé en qué lugares puedo dormir
Junto a los peores enemigos
De los ricos
Y lo hago sin que los animales y seres odiados
Me maltraten a mí por parecer humano.

Conforme me encuentro
En el ángulo por el cual
Todos ustedes doblarán
Porque yo,
Sin ser gran cosa,
Los estaré esperando
Para ilusionar sus mentes sin fuerza.